En la Rambla de Palma, un paseo céntrico, se encuentra otro de los relojes. Está en la fachada sur del convento de Santa Teresa (del s. XVII) y data de entre los siglos XVII y XVIII. Fue redescubierto durante las obras de restauración de dicho convento en la primera década del presente siglo.
Es muy sencillo, labrado directamente en el muro y marca numeración arábiga con líneas horarias y medias horas que comprenden desde las 6 a las 17 h.
Es muy sencillo, labrado directamente en el muro y marca numeración arábiga con líneas horarias y medias horas que comprenden desde las 6 a las 17 h.
Es un típico ejemplo de reloj no ornamental, atendiendo simplemente a su funcionalidad.
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